martes, 9 de diciembre de 2008

Mordiscos

Muchas veces yo hablo a mordiscos, les pego bocados a mis oyentes que incrédulos ven como poco a poco mis colmillos e incisivos se acercan a su yugular y les muerdo las opiniones contrarias a las mías. Me altero fácilmente cuando me tocan cosas como la familia, los principios, la niña, mi forma de hacer las cosas, mi tiempo y ¿Porqué no?, mi sur.

A nosotros nos llaman de muchas maneras, despectivas todas, como cuando nosotros hablmos de polacos, norteños y de todo aquello que nos sulfura de Despeñaperros para arriba. Luego nos pasamos casi todo el año deseando sus nieves y sus lluvias y ellos vienen a veranear a nuestras costas. El sur es diferente. Y el norte...
También se habla de la Andalucia occidental y la oriental, de la profunda y la subnormal profunda y al final, mordemos las yugulares de otras provincias hermanas cuando entramo en política y quién recibe más y porqué. Puestos a mordisquear nos separamos hasta por pueblos y barrios y jugamos a competir qué fiestas son más populares y quién vendrá a cantar en ellas.

En mi familia es un poco así. Tenemos que hablarnos a bocados para llegar a un acuerdo, plasmar una opinión o llegar 5 minutos tarde un sábado noche. Normalmente nos mordemos por turnos, yo a mi madre, mi madre a mi hermana, mi hermana a mí, mi padre a mi hermano, mi padre a mí, mi hermano a mi padre... Nunca gana nadie, pero todos tenemos heridas y cicatrices. Somos canívales en una relación obsesiva de amor-odio, sin la que no sabemos relacionarnos socialmente.

Siempre he pensado que esta es la razón de que no durásemos más de un año como ovo-lácteos- vegetarianos...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

quizá lo mejor sea buscar un tipo de canibalismo que no haga heridas, de ese que es con cariño

mi saludo

s

Malice dijo...

:) quizás...
Mientras aprendo a morder con los labios en vez de con los dientes, ando buscando un bozal de mi medida, cuero flexible, irrompible y cómodo de llevar jejejejejeje

Unknown dijo...

Malosilla, no te pongas bozal, que entonces nos privarías de tus palabras y yo por lo menos quiero seguir leyéndote mucho más...

A nadie le gusta que le opinen o critiquen su manera de hacer las cosas... Si les preguntaras a mis padres alucinarías de la cantidad de gente que ha opinado acerca de su (i)rresponsabilidad educándonos y que ahora, al tener hijos y al estar nosotros creciditos, se dan cuenta de que no lo hicieron tan mal...

La familia de mi madre en general también son de los que hablan a mordiscos. Yo, por el momento, no muerdo, quizás es que mis colmillos aún son de leche... jijiijij

¿Ya has descubierto quién soy?

Malice dijo...

jejejejejejej pues a ver... mujer, del 82, madrid, "gata cosmica"... ostras!! me esta escribiendo Isabel Aboy!! chica no sabía mucho de tí desde Médico de Familia!

jajajajajajaja Ais, Arancha, al final te has abierto un blog :D Voy ahora mismito a cotillearte jajajajajaja

Unknown dijo...

Isabel Aboy! :| Te asesino! Jajajajjajaja. Y sí, no había pensado que en el perfil ponía cosas que me delataban... jajajjajja. Qué mal estoy mare mía!! Gracias por empujarme al mundo bloggero! ;)

Malice dijo...

de nah! jajajajajajajajaja