sábado, 27 de septiembre de 2008

Que llueva, que llueva


Media España está inundada o inundada o limpiando el barro de haber estado inundada. Aquí nos ha llovido de refilón, como para que se moje el patio y la Elora se resbale cuando corre de un lado a otro, detrás de los indeseables. El jueves por la noche en todos los mapas del tiempo ponían nubes negras y rayos y mucha lluvia sobre Jaén , Málaga y Granada. Ayer hizo un sol que te cagas...
Yo de meteorología sé lo justo, que si el cielo está negro es de noche y si está azul es de día. Ayer era evidente que no iba a caer ni gota, el de los mapas tuvo que equivocarse de todas todas o la nube esa negra se lo pensó y se fue para Almería a seguir lloviendo sobre mojado.

Hoy hace "frío", pero de ese frío que aquí en el sur nos hace ponernos hasta el anorak mientras la otra mitad de los peatones pasean en manga corta, eso sí con la piel de gallina proclamando los 11 grados de mínima que nos han pronosticado para hoy sábado. Aquí es que somos muuu exageraoooos!! Yo soy de esos en manga larga, no puedo evitarlo. Luego sale el sol a media mañana y me cuezo debajo de la chaqueta vaquera por no llevarla colgando doblada en el brazo, pero es que no sé lucir cacho aunque te congeles un poco. Mi abuela siempre dice: " A las 12 cambia el día" y no se equivoca nunca. Que amanece nublado, a mediodía abre o que amanece con sol, a mediodía se nubla. También dice aquello de " Las medias ni para los pies" pero yo nunca le he hecho mucho caso y por eso me faltan dos libros y tres cintas de video en mis estanterías desde hace años.

Pronóstico para hoy: parcialmente nublado. Me duele el dedo del pie y el cielo está gris perla...

"Que llueva, que lllueva, la virgen de la cueva, los pajarillos cantan, las nubes se levantan, que si, que no, que caiga un chaparrón y rompa los cristales de la estación!!!"

martes, 23 de septiembre de 2008

Visitas

Me gusta invitar a mis amigos y familiares a mi casa, cocinar para ellos un bizcocho o una cena mexicana o hacer chino casero, que me visiten y pasen un rato de sus vidas conmigo y que hablemos sin parar de cosas que ya sabíamos y de otras que no nos habíamos dicho por teléfono. Las visitas están bien pero no todas salen como queríamos y a veces "algunos" llegan con 2-3 horas de retraso, a mitad de una comida que habíamos empezado casi a digerir por no hacer esperar a los demás que habían venido, sin una llamada de aviso, sin un motivo grave y sin abrir la boca para disculparse por el retraso...

Cuando estas a gusto las meriendas siempre se acaban al segundo bocado de bizcocho porque han dado las 8 sin darnos ni siquiera cuenta. Eso siempre me pasa con Moni, que se me hace demasiado corto. Otras veces, a pesar de rallar ya la madrugada la conversación se alarga y se alarga y pasan otras dos horas para recorrer la distancia que hay entre los sofas y la puerta. Con María y Joaquín siempre nos queda algo que decirnos en la calle, a la intemperie y pasando frío y por más que nos lo prometemos antes de abrir la puerta, caemos y ocurre. Es lo que tiene sentirse cómodo.

Odio las visitas relámpago, la visita del médico y no saber qué decir o qué hacer durante una visita y que una hora se convierta en 30 horas, mirando continuamente el reloj. Odio las visitas por compromiso, las obligadas, las incomodas y las que tienen condiciones. Odio que me visiten por sorpresa, me gusta que la gente me llame antes y cuente conmigo. Por supuesto, hay sorpresas y sorpresas y personas bienvenidas siempre. Me gusta sentir que he sido yo quien ha invitado y poder atender a mis visitantes como una buena anfitriona, pero mi casa está abierta para todos los que me quieren y me hacen sentirme a gusto a su lado, todos ellos pueden entrar sin llamar.

Esta tarde tengo visita. Será corta, larga, rápida, lenta, preparada y con sorpresa, por compromiso y deseada. Sé que miraré el reloj y que después echaré en falta la conversación. Espero no quemar el bizcocho...

viernes, 19 de septiembre de 2008

Limpieza gatuna

Los lunes y los jueves son mis días de limpieza casera. Normalmente los jueves acaban prolongándose a los viernes porque me pierdo entre tanta habitación y tanto polvo y mopa y mocho... Es lo que tienen las casas grandes.
Las gatas se lo huelen desde primera hora, les encanta cuando le paso la fregona al porchecillo del patio donde han establecido su cuartel general. El olor de la legía las vuelve locas y tardan tres segundos en pisarme lo mojao, se tumban y se acicalan dedicando casi tanto tiempo como el que yo le dedico a la casa. Keera me recuerda a cuando eramos pequeños y sobre los 6-7 años entrabamos en la época esa de que no había Dios que nos metiera en la bañera. "¡Con lo que te gustaba el agua de chica!" me chillaba mi madre bañandome a la fuerza...
Pues eso hace la pequeña felina, que se da dos lametones y se queda tan pancha, como diciédole a Lluvia "¡Ale! ¡Ya me he lavao!". La siamesa la mira como me miraba a mí mi madre y sigue acicalándose las patas, la cara, el rabo, las orejas, como sin hacerle caso. Keera se aburre de esperarla para jugar, cansada de verla lamerse el pelo de la misma zona una y otra vez y cuando hace el ademán de alejarse, Lluvia cae sobre ella y le hace el abrazo del oso. Antes de que la gatita pueda protestar, la siamesa ya está lavándole la cara, las orejas, las patas, el pelo del cuello...
Así se pasan toda la mañana, ellas dedicadas a su limpieza gatuna y yo dedicada a mi limpieza casera.


martes, 16 de septiembre de 2008

Una so manta palos

Estaba yo baldeando rápidamente el patio, manguera en mano, vaqueros remangados y dos pinzas de ositos en el flequillo. Les he oído de lejos, porque no saben hablar en otro tono. La perra les ha olido antes, les tiene la guerra declarada. Y con razón. Al pasar, dos patadas fuertes y un puñetazo a la cancela. Ha temblado todo. Entre los ladridos de la perra y mi “Me cago en tus muertos”, sus risas y sus cantos. Me han pillado con las llaves en el bolsillo y, cortando como he podido la manguera, he abierto la puerta...

Eran tres, la madre, el mayor y el pequeño. Al verme salir, la madre entre risas mal disimuladas le ha dado una colleja al mayor y gritando le ha dicho: “ Niño, que te he dicho que no toques más las cancelas o te voy a dar una so manta palos”. El pequeño ha echado a correr directamente. Y yo, con la mirada asesina enfocada, me he quedado de pie, goteando malaleche en la acera, viendo como se alejaban.

Este es el pan nuestro de cada día, unas veces les grito, otras me callo, otras abro la cancela y los sigo con la mirada, otras enchufo la manguera por encima y los mojo... La mayoría de las veces no son los mismos, pero a la perra la cabrean todos, incluso la vieja que pasa con el carrito de la compra. Ellos le patean la puerta, le meten junquillos por el lateral para hacerla rabiar o le tiran naranjas, no siempre son los niños. Yo sé que son los grandes los que pasan rayando la cancela, los que echan trozos de bloques por encima del muro y los que lanzan pelotas de petanca a la uralita. Tengo un patio hermoso en el que no puedo tener aparcado mi coche por miedo a que me rompan una luna de una pedrada.

Vivo en el centro del pueblo, en una plaza de chalets adosados y con un alcalde que no hace más que hacer parques e inaugurar espectáculos en el centro cultural para que nos den el calificativo de ciudad. Cortar una calle debería de costar menos que todo eso, pero no es prioritario. Yo no soy racista, pero no creo que haga falta decir quién me patea el ánimo. Creo firmemente que la integración hay que quererla y que ganársela...

jueves, 11 de septiembre de 2008

Segunda Primavera

Cuando tenía 10-12 años era una ecologista radical. Recuerdo que le pegaba a los botes de O-Cedar de mi madre dibujos de calaveras poniendo “tóxico, no usar”, soñaba con hacerme socia de ADENA, ser miembro activo de Greenpeace y mi mayor ambición era estudiar química para neutralizar los CFCs que consumían la capa de ozono. Hoy en día, con 30 años, mi visión del calentamiento global y lo mal que está el Medio Ambiente se reduce a imaginarme a los ositos de Coca Cola nadando en el polo donde antes todo era hielo. Me conformo con decirle a la gente que conozco que deben de ser consecuentes con sus mascotas, que un hámster no es una mascota para niños y que no tiren la colilla al suelo porque detrás de ellos puede haber un niño pequeño-aspiradora ...
El mundo no parece estar muy satisfecho con lo que he hecho con mis ganas de mejorarlo.

El sábado por la mañana, Ciruelo se rebeló contra mi pasividad y ha traído la primavera de nuevo a la terraza, una segunda primavera irreal y desconcertante que no conseguirá que vea sus flores convertidas en pequeñas ciruelas. El otoño está entrando y en breve perderá sus hojas, se quedará escuálido y seco, hibernando para cuando la primavera llegue en su fecha prevista, a principios de Marzo. Las flores se perderán en cuanto venga el viento y (ojalá) las primeras lluvias copiosas. Habrá sido un hermoso intento en vano...

No imagino el mundo en que vivirá mi hija y sus hijos y los hijos de sus hijos, pero igual no está tan lejos de lo que pensábamos. Creo que no necesito más imágenes del polo, me basta con haber visto florecer un ciruelo en Otoño.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Maluras, médicos y noches en vela

Tenía asumido que llevar a la peque a la guarde de nuevo era que se resfriara, que tuviera mocos, que yo me pusiera mala con ella y que no me dejara dormir. Lo que no tenía asumido es que todo eso podría pasar en la primera semana de guardería ^^U
Así que aquí estoy, con falta de sueño y dos noches en vela en el cuerpo, tortículis por los pocos ratos que he cabeceado en el sofá, pringada de dalsy hasta las bragas, con dolor de garganta y mocos y con la niña en casa por lo menos hasta el miércoles. Ella está... pues como cualquier niño con una irritación grande de garganta, es decir, jugando, cantando y destrozándome medio salón. A mí ya no me quedan fuerzas, me duele sólo pensar en hacer de comer, y más estando segura de que a lo largo del día estaré peor y de que este resfriado que me ha pegado me dejará k.o.
Deberíamos de tener una mamá de repuesto que nos sutituyera y nos cuidara cuando pasan estas cosas, que haga la comida, que planche y que se ocupe de la fiera de mi niña, que sigue siendo fiera hasta con fiebre. A mí me vendría que ni pintada hoy. Eso sí, nada de abuelas, sólo un clon de una misma...
Hasta que la ciencia invente algo de esto, me toca tomarme el frenadol o lo que sea que quede en el armario de las medicinas y tirar del carro de mi casa.

P.D.- ¡A quien diga que la mujer no es el eje central del hogar que lo parta un rayo divino!

viernes, 5 de septiembre de 2008

Pataletas

Hoy he deseado que te murieras, y que contigo se fuera todo el daño y toda la rabia que me haces sentir, sabiéndolo y sin saberlo, como si al morirte no fuera sentirme peor de lo que me siento ahora sólo con haberlo deseado. Como un niño pequeño me he agazapado entre las sábanas en plena pataleta. Llorar no me ha servido de nada, maldecirte sólo me ha aliviado lo justo. Y me he sentido tan horrible, tan mala persona, que estar en mí me quemababa.

Hoy he deseado que te murieras, y, después de pensarlo,
en mi berrinche infantil, también he deseado
morirme yo contigo...

lunes, 1 de septiembre de 2008

Empezamos bien...

Esta mañana la niña se ha quedado sin guardería.
En Abril eché la preinscripción en la que había estado todo el año y que me encantaba pero como han pasado a ser de la Junta de Andalucía sólo les han concedido 13 plazas para niños de la edad de la mía. Por un día mi niña se ha quedado en la calle, y digo por un día porque los nacidos en el 2006, aunque fuera el 31 de Diciembre, sí que tenían plaza. Los que nos hemos jodido hemos sido los del 2007. Ha dado igual que ellas por aquel entonces hubieran prometido que el cambio sería para mejor, que los que ya habían estado allí tenían preferencia y que ningún niño se quedaría fuera.
Me han dicho que esta tarde hay reunión con el concejal para ver qué se iba a hacer, si podían ampliar 4 ó 6 plazas más o cómo iban a repartir esas 13 plazas. A mí me han dicho directamente que no me haga ilusiones. Parada y en casa, ¡El culo del mundo! Las plazas serán para las que curren y lo necesiten de verás...

Yo no digo que no, tenerla en casa todo el día es un coñazo pero me jodo y me apaño. Si trabajas, eso no puedes hacerlo. Pero me he sentido como si me echaran en cara que estaba pujando por tener una plaza que no me merecía. Esta tarde va a ir a la reunión... ¡pues eso, el concejal! Yo me quedo en casa, que las madres currantes y rabiosas lo despedacen. ¡Y encima hay que pagar casi el doble o más que el año pasado! Porque eso de los % de subvenciones habrá que ver a quién se las dan...
Me pregunto qué tiene de bueno entonces que se queden con las guarderías el Gobierno y la Junta porque, Señores, a mí me han jodido y bien. Además de los ingresos deberían de pedir la cuantía de la letra de la hipoteca pero claro! tener una casa y pagarla es un lujo, deberíamos vivir de alquiler y cagarnos en los muertos de los menores de 30 años que también tienen subvención por ello. Eso de que han aumentado las plazas en los centros de educación infantil de 0 a 3 años me gustaría a mí que me lo enseñaran con hechos porque lo que es en el pueblo acaban de dejar por lo menos a 15 madres, que el año pasado no tenían problema de admisión, acordándose de la familia de Zapatero.

P.D.- Mañana, a las 9 y media llevaré a la niña a la guardería. Una nueva, privada, cerquita de casa, sin problemas para darme una plaza y que me cuesta aún menos que la del año pasado, ¡Esto es el mundo al revés! He pagado el mes conforme me ha enseñado las instalaciones y explicado todo. No me hace falta ir esta tarde a la reunión para saber que mañana serán madres desesperadas arañando plazas en cualquier centro, eso se huele en el aire... y yo, parada y en casa, les llevo un día de ventaja XDDDDDD